La ubicación de cualquier proyecto siempre ha sido un factor determinante, ya sea para vivienda o un proyecto mixto.

La situación actual, ha inducido que la importancia de la ubicación es aún más importante, volviéndolo esencial para volver poco a poco a las actividades que se realizaban con anterioridad a la cuarentena.

La explotación de las actividades físicas se ha limitado debido al COVID-19, y aunque muchos establecimientos ya se hayan reincorporado, muchos otros aún se encuentran en ese proceso debido a que, sus funciones son meramente físicas, sin embargo, no se han detenido tales actividades, pues, ha ayudado a buscar nuevas estrategias, para continuar con las labores. El término del aislamiento y el regreso a las diligencias a las que estábamos acostumbrados, generará la oportunidad de volver al desarrollo y satisfacer la demanda a un ritmo evolucionado. El sector de oficinas se ha complicado debido a que algunos colaboradores dependen del servicio público y está enfocado en el regreso de las actividades cotidianas, el distanciamiento social aún en el servicio de transporte, ha provocado que se busquen locaciones cercanas, ya sea para irse caminando o bien, para trasladarse en el menor tiempo posible.

La mayoría de las empresas ya se han reincorporado a sus actividades cotidianas, permitiéndole a sus trabajadores el regreso a sus labores, ello, ha creado que los ciudadanos busquen habitar en un lugar que les permita el fácil traslado o que se encuentre lo más cerca posible de su lugar de trabajo.

Nos vemos en la necesidad de continuar desarrollando los intereses de los clientes, crear estrategias para las ubicaciones de nuevos proyectos, analizar los requisitos del mercado y ofrecer a los usuarios nuevos productos.

‘‘La vida te podrá obstáculos pero los límites los defines tu’’
Anónimo

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